Mujer inquieta, lo primero y lo último que hacemos en este mundo en el que vivimos es respirar. La respiración es sinónimo de vida, por lo tanto respirar es mucho más que ventilar, inhalar o exhalar.
¿Cómo te hace sentir esto?
Seguramente en este instante estarás poniendo el foco en tu respiración, normalmente respiramos sin darnos cuenta, sin ser conscientes de que lo estamos haciendo.
¿Cómo es tu respiración ahora?
Inspirar y espirar conscientemente es oxigenar nuestros órganos internos, es conectar con nuestro cuerpo, calmar nuestra mente y sentir serenidad y paz interior. La respiración consciente nos conecta con el aquí y el ahora, con el regalo del momento presente, con nuestra esencia, con la vida.
Además, cuando estamos alteradas o ansiosas nuestra respiración puede ser la mejor vía para relajarnos y cambiar nuestra energía.
«Nuestras emociones alteran el ritmo de nuestra respiración pero también tenemos el poder de influir en nuestras emociones a través de nuestra respiración» – Miquel Mas Grau
Sigue estos 4 pasos para incorporar la respiración consciente en tu vida:
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Para o interrumpe lo que estás haciendo durante unos segundos o minutos.
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Respira lenta, profundamente y sin pausas, como hacen los bebés.
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Observa tu interior, pon la atención en ti de forma neutra y sin juicios.
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Siente tu cuerpo, tus emociones y tu energía