"Llegué a Gemma perdida, agobiada, inconforme conmigo misma y desubicada. Ahora me encuentro mucho más tranquila y a gusto conmigo misma, desahogada y en un proceso de autoconocimiento. Durante este proceso individual me ha encantado la sensación de ser escuchada, entendida, atendida, y respetada. Y las explicaciones que me dio Gemma sobre mis inquietudes y dudas. Estoy dejando atrás en mi vida la necesidad de ser aprobada por los demás. Desenvolverme en un estado de desequilibrio. La necesidad de autocontrol. Y me estoy abriendo a escuchar, a sentirme respetada, querida y valorada como soy, a potenciar mi lado positivo, a aceptarme y entender que hay ocasiones en la que hay que dejar fluir las cosas. Agradezco la salud que tengo y la de los que quiero. Mi trabajo, mi libertad, mi independencia, mi economia, la gente que tengo a mi lado. Agradezco tener ese afán de seguir desarrollándome, porque es lo que me ha permitido estar dónde me encuentro ahora."